Tú pídenos lo que necesites, explícate a tu manera, sin tecnicismo ni nada de eso, con tus palabras, como se lo dirías a un colega, vaya. No te preocupes, que ya nos encargamos nosotros de traducirlo y de entenderte.
Estás más perdido que el mando de la tele en el sofá, ¿verdad? No te preocupes, es totalmente normal: nadie te ha enseñado cómo manejar tu negocio en el mundo digital ni te ha dado la fórmula mágica para triunfar. Te tenemos una noticia buena y una mala. Empezamos con la mala, que apetece más quitársela de encima: no existe ninguna fórmula mágica. La buena es que estamos aquí para asesorarte, escucharte, analizar tu situación y ayudarte con lo que mejor funcionará para tu negocio.
Parece que la mala noticia ya no tiene tanta importancia, ¿eh?
Reserva tu cita y hablamos.
Sí, sirven para que te vean, pero también para que te reconozcan y conecten contigo. Lo fundamental es contar con una buena estrategia y mantener coherencia en todo lo que se publica. Que sí, lo que hace tu hijo o el amigo de tu primo está muy bien, pero si de verdad quieres tener un perfil profesional que hable por tu negocio, déjate asesorar por nosotros.
No se trata de estar en todas partes ni de publicar por publicar. Aquí nos ocupamos de que tu presencia tenga sentido, de que lo que compartas hable de ti y de lo que haces, y de que la gente que te siga lo haga porque le interesa de verdad.
Tenemos varios planes disponibles; nosotros te recomendamos el Pro, pero si quieres darle a tope a tus redes sociales, podemos hacerte un plan personalizado. Cuéntanos y concretamos.
Hoy en día, no tener web suena hasta raro; es como si todo el mundo tuviera las entradas para un partido importante y tú ni te hubieras enterado de que existe ese partido. Como que te sientes un poco por detrás del resto, ¿no?
La web es lo primero que espera encontrarse alguien cuando busca tu negocio en Google. Es como una carta de presentación, un sitio donde encontrar información sobre ti, tu contacto o tus servicios. Una prueba de que existes, por así decirlo. No hace falta que sea la más moderna ni la más espectacular, pero sí que sea clara, fácil de usar y que transmita quién eres. Y aquí nos encargamos de todo eso: de que tu web funcione como toca.
¿Estás listo para dejar de pasar desapercibido y que, por fin, te encuentren cuando te buscan?
A ver, esto no quiere decir que vayas a hacerlo TODO tú solo, porque es un faenón. La idea es que aprendas a manejar un poco tu negocio en el ámbito digital: que si un día quieres subir una publicación a Instagram, puedas hacerlo; que si quieres probar a hacer cosas con IA, sepas por dónde empezar; que si te apetece añadir alguna imagen extra en la web que te hagamos, lo puedas hacer tú mismo; o que si te interesa saber a qué hora hay más actividad en las redes sociales, puedas consultarlo.
Darte autonomía, vaya. Que no tengas que depender de nosotros para todo y te puedas sentir más libre de hacerle algún retoque a lo que quieras.
Si te molaría aprender, solo tienes que decírnoslo.
La palabra “publicidad” siempre nos remite a algo caro, algo que va a hacer que nos duela el bolsillo. Pues tengo buenas noticias para ti: hoy en día, hacer publicidad puede salirte muy barato.
La idea es alejarnos de los medios masivos y convencionales, de los anuncios de la tele, y centrarnos en otros medios. Por ejemplo, las redes sociales, que ofrecen una alta personalización y segmentación, además de colaboraciones con influencers, con un alto rendimiento. También está Google, una buena opción si tu público utiliza este buscador para encontrar productos o servicios como los que ofreces. O incluso la propia calle; y no te hablo solo de lonas y marquesinas (que si te mola, también se puede hacer), sino del street marketing, una estrategia que puede generar mucho impacto.
Vaya, que se pueden hacer mil cosas.
¿Hablamos y nos cuentas qué tienes en mente?
Oye, pues vas bien. La verdad es que las marcas sí que necesitan tener una personalidad, algo que les diferencie y las haga únicas. Pero todo tiene que seguir una estrategia y mantener una coherencia para que tenga sentido.
Es como cuando ves unas zapatillas que molan, pero que ni te planteas comprarte porque no van contigo. Porque esas zapatillas, por muy chulas que estén, no tienen nada que ver con tu estilo. Algo así pasa con el branding, no puedes tener un logo elegante si tu marca habla de una manera más coloquial y desenfadada. El resultado sería algo parecido a cuando tu tío, el que siempre está serio, se bebe unas cuantas copas y se pone a cantar. Raro.
En otras palabras, el branding es como un traje a medida: todo debe encajar, desde los colores, la tipografía, el tono de comunicación, hasta la experiencia que ofreces. Si alguno de esos elementos está fuera de lugar, la gente percibe que algo no cuadra, y pierdes credibilidad.
O, dicho de otra forma, un completo.
El mundo digital a veces puede parecer algo complicado, y por eso hemos creado este método que, básicamente, significa que te hacemos de todo. Es perfecto si quieres exprimir al máximo todo el potencial que ofrece el mundo digital y darle a tu negocio la visibilidad que merece.
¿Nos preparamos para el impacto?
Investigamos tu mercado y competencia
Mejoramos tu presencia en redes
Potenciamos tu visibilidad en Google
Atraemos a tus clientes con publicidad
Contactamos con los que ya se han interesado
Transformamos seguidores en clientes
Analizamos y optimizamos
Podemos tomarnos un café, almorzar o, bueno, también podemos empezar con la visibilidad de tu negocio.
